Hace 24 años Ucrania renunció de las armas nucleares en cambio de las garantías de seguridad, confirmadas por Gran Bretaña, los Estados Unidos y la Federación de Rusia en el Memorándum de Budapest en relación con la adhesión de Ucrania al Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP). En particular, estos estados se comprometieron a abstenerse de amenazar o recurrir a la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de Ucrania.

Los estados garantes se obligaron a jamás utilizar sus armas contra Ucrania.

Fueron estos garantías que hicieron posible la aprobación por la Verjovna Rada (Parlamento) de Ucrania de la Ley de Ucrania sobre la Ratificación del TNP.

El 25 de noviembre de 2018 la Federación de Rusia realizó un nuevo acto de la agresión armada contra Ucrania, al atacar los navíos de la Marina de Guerra de Ucrania en el mar Negro y el estrecho de Kerch.

Este ataque cínico y traicionero es una continuación de la agresión armada contra Ucrania, comenzada por la Federación de Rusia el 20 de febrero de 2014.

Ucrania sigue considerando el Memorándum de Budapest como una importante herramienta internacional de garantizar la seguridad de Ucrania e insta a Rusia a cumplir con sus obligaciones en su totalidad.

La agresión rusa y la violación de la condición del rechazo de Ucrania de las armas nucleares socavan el régimen internacional de no proliferación, lo que definirá el futuro de las relaciones con los países que pueden optar por el desarrollo de este tipo de armas.

El 27 de noviembre de 2018 el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania, basándose en el párrafo 6 del Memorándum, se dirigió a los países firmantes del Memorándum de Budapest con una exigencia de celebrar las consultas urgentes con el fin de asegurar el cumplimiento completo de las obligaciones y de poner fin inmediatamente a la agresión rusa de Ucrania.

Únicamente las medidas activas podrán restablecer la confianza en el Memorándum de Budapest y las acciones de la comunidad internacional en el afianzamiento del régimen internacional de no proliferación.