El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania expresa su protesta categórica con relación a nuevos casos de la violación de los derechos de los tártaros de Crimea por parte de la Federación de Rusia.
Las últimas acciones de las autoridades rusas de ocupación vuelven a confirmar que la única herramienta contra los que están en desacuerdo con la ocupación ilegal de la Crimea ucraniana son las represiones y la intimidación. Es este enfoque que damos a los allanamientos infundados de hoy en las casas de tártaros de Crimea, como resultado de las cuales los ciudadanos de Ucrania Eskender Abdulganiev, Rustem Emiruseinov y Arsen Abhairov fueron ilegítimamente detenidos.
Estamos preocupados asimismo con las continuas intenciones de Rusia de usar para la agresión contra Ucrania los instrumentos de la cooperación internacional en el área de la lucha contra la criminalidad. El último ejemplo fue el fallo de la llamada “corte suprema” de Crimea, según la cual Eskender Bariev, presidente del centro de recursos de los tártaros de Crimea y miembro del Medjlis del pueblo tártaro de Crimea, podía ser anunciado para la búsqueda internacional. Llamamos la atención al hecho de que esta decisión de la institución ilegítima de ocupación es nula desde el punto de vista legal y no debe tener ningún tipo de consecuencias o acciones legales a nivel internacional.
Instamos a la comunidad internacional a aumentar la presión sobre el estado agresor con el fin de obligar a Rusia a poner fin a las violaciones de los derechos humanos en la Crimea temporalmente ocupada, liberar a los ciudadanos ucranianos ilegalmente detenidos y restaurar la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas.
La Federación de Rusia debe cumplir en su totalidad las resoluciones de la Asamblea General de la ONU “Situación de los derechos humanos en la República autónoma de Crimea y la ciudad de Sebastópol, Ucrania”, del 19 de diciembre de 2016, 19 de diciembre de 2017 y 22 de diciembre de 2018, así como del Tribunal Internacional de la ONU relativo a las medidas de coerción en el ámbito de la demanda de Ucrania contra la Federación de Rusia sobre la aplicación de la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial.