Las recientes declaraciones de los dirigentes de Belarús sobre supuesta preparación de militantes armados en el territorio de Ucrania no corresponden a la realidad y dañan el desarrollo de las relaciones de buena vecindad entre Ucrania y Belarús.
Llamamos la atención que fue justamente el socio de Belarús en el Estado de la Unión – la Federación de Rusia, la cual, en el marco de la agresión híbrida, llegó a desplegar, tanto en su territorio, como en las tierras ucranianas ocupadas, unos campamentos enteros para el entrenamiento de mercenarios y militantes. Al apoyar y exportar el terrorismo, Rusia viene socavando, de manera premeditada, la estabilidad y la seguridad en la región que abarca tanto Ucrania como Belarús.
Ucrania ha entregado a la Corte Internacional de Justicia de la ONU numerosas pruebas del apoyo y del financiamiento del terrorismo, por parte de Rusia, en los territorios ucranianos ocupados.
Estamos dispuestos a una estrecha cooperación internacional en la lucha contra cualesquiera manifestaciones del terrorismo, inclusive con Belarús.