Ucrania condena categóricamente otra provocación, organizada por el Kremlin, y descarta todas las acusaciones infundadas contra nuestro estado. Bajo el falso pretexto, el Kremlin despliega una operación especial híbrida para justificar la ocupación de Crimea y sus futuras acciones agresivas contra Ucrania.
Una profunda preocupación la está causando la concentración de las armas rusas en los territorios, temporalmente ocupados, de Donbas y Crimea y a lo largo de la frontera ucraniano-rusa. Esta situación es muy peligrosa para la paz y la estabilidad no sólo en Ucrania, sino también en toda la región. El estado ocupante no se limita a los bombardeos diarios en Donbas. A través de las provocaciones, organizadas en Crimea, trata de endosar sobre Ucrania y nuestros socios internacionales la responsabilidad de sus acciones destructivas.
Ucrania condena categóricamente el terrorismo en todas sus manifestaciones. En este contexto, cabe recordar que desde el inicio de la agresión rusa contra Ucrania en febrero de 2014, como consecuencia de los actos terroristas, llevados a cabo con la participación del estado agresor, así como por su apoyo financiero, material y técnico, fallecieron miles de civiles de Ucrania y otros estados. En particular, se trata del derribo del vuelo MH17, los ataques con misiles contra Volnovakha, Mariupol, Kramatorsk y otras ciudades pacificas de Ucrania.
Ucrania llama a la comunidad internacional que tome todas las medidas políticas y diplomáticas para influir en el Kremlin y prevenir una nueva ola de la agresión contra Ucrania y la frustración final, por el Kremlin, del proceso de Minsk.