Hace dos años, por una convincente mayoría de los votos de la Asamblea General de las Naciones Unidas, fue aprobada la resolución "Integridad territorial de Ucrania", que confirmó la soberanía, la independencia política, la unidad y la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas. A favor de la resolución votaron 100 países, contra – 11 países encabezados por Rusia.

El llamamiento a todos los Estados a negarse y abstenerse de las acciones, dirigidas a la ruptura parcial o completa de la unidad nacional y la integridad territorial de Ucrania, incluyendo cualquier intento de cambiar las fronteras de Ucrania a través de la amenaza o el uso de la fuerza u otros medios ilegales, fue una evidencia más del apoyo absoluto, por la comunidad internacional, a Ucrania que resultó víctima de la agresión militar de Rusia.

Lamentablemente, incluso después del veredicto claro de la comunidad internacional, Rusia no retornó al derecho de las naciones civilizadas. Por su ocupación ilegal de la República Autónoma de Crimea y de la ciudad de Sebastopol, así como por la invasión militar del Donbas ucraniano, Moscú obstinadamente continúa violando el derecho internacional.

Durante los dos últimos años de la ocupación ilegal, Rusia continúa menoscabando, a gran escala, los derechos humanos en Crimea, incluyendo de los tártaros de Crimea, indígenas de la península Crimea.

Ucrania llevará a cabo todos los pasos, previstos por el derecho internacional, para la resistencia a la agresión de Rusia, la restauraсión de la integridad territorial ucraniana y la indemnización de los daños causados por las acciones ilegales.

La Resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas sigue siendo un instrumento clave para la desocupación de Crimea, y Ucrania cuenta con el futuro apoyo de la comunidad internacional en la restauraсión de la integridad territorial de nuestro estado dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas.