El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania opone categóricamente contra la utilización sistemática, por las autoridades rusas, de la intimidación, torturas, tormentos, y otros métodos de trato inhumano o de trato que lesiona la dignidad de los ciudadanos de Ucrania que se encuentran en el territorio ucraniano ocupado por las fuerzas de ocupación rusas o que se encuentran ilegalmente y contra su voluntad en el territorio de la Federación de Rusia.

La profunda indignación está causada por los hechos de la utilización de torturas y otros métodos de trato inhumano a Stanislav Klykh, Mykola Karpiuk, Oleg Sentsov, Gennadii Afanasiev y otros ucranianos detenidos en las casamatas rusas.

Consideramos esta política de la violencia y humillación por la Federación de Rusia como una prueba irrefutable del sesgo político, de la falta de fundamento y del absurdo de todas las causas gestionadas contra los atrapados ucranianos, así como de la incapacidad de las autoridades rusas de afirmar sus acusaciones por medios legales.

Además monitoreamos con atención todos los casos de la persecución por razones políticas y nacionales, intimidación, utilización de torturas, secuestros, cometidos por las autoridades rusas o bajo sus connivencia directa, en la península de Crimea ocupada y en los ciertos distritos de las regiones de Donetsk y Lugansk.

La escala, la evidencia sistemática y continua del cometido prueban una elección consciente por Rusia del camino criminal contra la humanidad.

Hacemos hincapié en que una conducta ilegal e inhumana del estado agresor y del estado ocupante en relación con el humano, sus derechos y libertades es un elemento de la manifestación del crecimiento en la Federación de Rusia del totalitarismo y dictadura que constituyen una amenaza directa para Europa y la seguridad internacional.

Intencionalmente violando las normas fundamentales del derecho internacional en la esfera de los derechos humanos, fijadas en particular en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, adoptada por la Resolución de la Asamblea General de la ONU el 10 de diciembre de 1948; los Pactos Internacionales de Derechos Civiles y Políticos y de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, adoptados por las Resoluciones de la Asamblea General de la ONU el 16 de diciembre de 1966; Los Derechos Humanos en la Administración de Justicia, adoptados por la Resolución de la Asamblea General de la ONU el 20 de diciembre de 1971; la Declaración sobre el derecho al desarrollo, adoptada por la Resolución de la Asamblea General de la ONU el 4 diciembre de 1986; el Convenio para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales de 1950; la Acta final de la Conferencia sobre la Seguridad y Cooperación en Europa del 1 de agosto de 1975; así como en varias convenciones internacionales que condenan tormentos y otro trato inhumano, la Federación de Rusia, por lo tanto, aspira a volver todo el mundo a los tiempos de arbitrariedad, desprecio por la vida humana y el estado de derecho fuerte.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania de dirige al Comité Europeo para la Prevención de la Tortura, al Subcomité de la ONU para la Prevención de la Tortura, al Grupo de Trabajo del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre la Detención Arbitraria y al Grupo de Trabajo del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias con el llamamiento para monitorear esmeradamente la situación de los ciudadanos Ucrania detenidos ilegalmente en el territorio de la Federación de Rusia y en los territorios ucranianos ocupados por Rusia.

En Ucrania se llama a la comunidad internacional para que fortalezca la presión conjunta a la Federación de Rusia como un violador arrogante del derecho internacional para prevenir nuevos abusos de los derechos, libertades, dignidad humana y vida de los ciudadanos de Ucrania que son víctimas de la agresión de la actividad criminal de Rusia y de sus órganos estatales.