El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania expresa su categórica protesta a la Federación de Rusia y a sus autoridades de ocupación en el territorio de la República Autónoma de Crimea con motivo de la detención sin fundamento del Arzobispo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana Kliment.
El Arzobispo de Simferópol y Crimea, Kliment, desempeña una misión humanitaria – como jefe de la Misión ortodoxa de ayuda a víctimas de las violaciones de derechos humanos y a personas privadas de libertad.
Con esfuerzos de muchas personas el Arzobispo Kliment quedó en libertad, pero sigue bajo la amenaza de persecuciones, al igual que otros ciudadanos de Ucrania que resisten a la ocupación.
Exigimos que el régimen del Kremlin deje de perseguir a autoridades eclesiásticas y representantes de confesiones en los territorios temporalmente ocupados de Ucrania.
Llamamos a la comunidad internacional, a nuestros socios internacionales y a las organizaciones de derechos humanos a condenar la nueva violación de los derechos humanos en la República Autónoma de Crimea.